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Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported.
octubre 18, 2011 por Antonio Pavón Leal
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Tierra calma, tierra yerma, que si se ara, se siembra, y se cuida convenientemente dará fruto. Y, además si la tierra es medianamente buena en sí misma dará mucho fruto. La madre tierra, que nos provee del sustento necesario, es como una metáfora del ser humano y el desarrollo de su vida.
Esto dice el I Ching en el comentario del segundo hexagrama, K’un (Lo Receptivo, la Tierra):
«Es la perfecta pieza complementaria de lo Creativo, su contraparte, no lo opuesto; una complementación y no una hostilización. Es la naturaleza frente al espíritu, la tierra frente al cielo, lo espacial frente a lo temporal, lo femenino-maternal frente a lo masculino-paternal».