Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported.
abril 5, 2016 por Antonio Pavón Leal
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¡Hermosa protección de Neptuno con dos palmeras a modo de dos espadas casi a punto de cruzarse!
Azorín: » Lector: yo soy un pequeño filósofo…» de » Las confesiones de un pequeño filósofo», entrañable obra.
¿No somos todos unos pequeños filósofos, cada cual a su manera? Miedo me dan aquellos que no lo son, que creen que lo saben todo y actúan en consecuencia: arrollando.
Pensaba que el tiempo no otorga aplazamientos en las acciones y que Grande puede ser cualquier persona y Pequeña también cualquiera, cada cual demostrará lo que es y quien es en el tiempo y con él.
Por supuesto, Teresa. A todos nos pone el tiempo en nuestro lugar. A cada cerdo le llega su San Martín, dice el refrán. Y añado con Rinconete: «Día de juicio hay». Y ese día todo saldrá a relucir.
Reflexionaba si la Vida es como una operación matemática de estas muy extensas pero que al final culmina en un simple resultado. Y que nuestro gran error es complicar sin necesidad lo que es sencillo y despojarle de su brillo natural.
Seguramente es como tú dices. Complicamos las cosas inútilmente. Desde siempre uno de mis objetivos ha sido simplificar.
Hello, very interesting.
You have a good day!
Anthony
Me alegro de que te haya gustado. Saludos cordiales.
Así sale la obra de teatro la mayoría de la veces.