Entre las hojas, ¿qué murmura el viento?
¿Qué secretos musita en el pinar?
En los naranjales nevados de azahar,
aquejado de un desfallecimiento,
¿por qué se apaga su voz un momento
y, vacilante, empieza a divagar?
¿Encarnando un exótico avatar,
nos cuenta el mismo o diferente cuento?
Cuando muere a los pies de las violetas
y, respetuoso, calla el ruiseñor,
¿no es ese venturoso resplandor
que nimba las almizcladas mosquetas,
no son ese silencio y soledad,
del viento la concluyente verdad?

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Preciosa tu poesía, me gustó un montón Antonio
Me alegro de que el soneto te haya gustado, y te doy las gracias por rebloguearlo. Saludos cordiales.
Reblogueó esto en CHEMIN POETIQUE: 2012/2013/2014y comentado:
Preciosa poesia de Antonio Pavon, y la reblogueo porque me gusta
Gracias por compartir Antonio
J’aime beaucoup, Antonio, la douceur de ce poème aux accents mélancoliques…
Merci, Odile, j’apprécie beaucoup tes mots. Bonne soirée.
Soneto delicioso, cuasi bucólico, musical, de una profunda delicadeza con imágenes hermosas. ¿Qué más puede decirse, poeta? Pues que gracias por entregárnoslo.
Enorme y cálido abrazo, Antonio querido.
Gracias a ti, Ernesto, por esa apreciación crítica tan lisonjera. He vuelto a leer el soneto con otros ojos. Un abrazo.
Excelente y bucólico amanecer de una primavera ajada.
¿Ajada, Superduque? Muchos adjetivos podemos adjudicar a la primavera andaluza: radiante, embriagadora, esplendorosa, florida, responsable de astenias y alergias, más calurosa que templada, literaria, agarena, incluso cruel, que fue como Eliot calificó el mes de abril, pero aquel no parece el más apropiado.
» Entre las hojas, ¿qué murmura el viento?»…Todo y Nada, lo Incomensurable, lo extrañamente sublime echándose de menos como barco amarrado a puerto deseando vientos propicios para partir.
» Entre las hojas, ¿qué murmura el viento?», nuestros secretos más confesables.
Precioso título del poema. El viento nos acaricia y embruja contándonos su intimidades más profundas y pasionales.
El viento, como puntualizas, lo sabe todo y nada. Es la voz libre, sin trabas, que, como el silencio, está preñada de multitud de palabras y significados. Es el vehículo de la inspiración, el depositario de nuestros secretos, el espíritu en acción.