Michel Tournier expone en estas pocas líneas toda una filosofía existencial que podría resumirse en dos palabras: marcha y frugalidad. Es decir, andar y practicar la templanza. Así es como viven los nómadas del desierto que han conseguido matrimoniar la vida física y la vida espiritual.
La clave se halla en la búsqueda de la verdad, por modesta que sea. Ese objetivo sólo se puede alcanzar desde la máxima sencillez. También es necesario tener la humildad de reconocer que la regeneración requiere una fuerza sobrehumana.
Por esa razón los trashumantes van de un lado para otro al tiempo que mantienen una actitud de espera. Para ellos no hay duda de que la reconciliación total se producirá tal vez mañana mismo o dentro de veinte siglos.
“Nosotros, nómadas del desierto, hemos elegido la extrema frugalidad unida a la actividad física más espiritual: la marcha. Comemos pan, higos, dátiles, productos de nuestros rebaños, leche, mantequilla clarificada, muy raramente quesos, carne todavía más raramente. Y andamos. Pensamos con nuestras piernas. El ritmo de nuestros pasos ejercita nuestra meditación. Nuestros pies imitan el avance de una mente en busca de la verdad, una verdad ciertamente modesta, tan frugal como nuestra alimentación. Subsanamos la ruptura entre comida y conocimiento esforzándonos en mantener una y otro en su sencillez más extrema, convencidos de que elaborándolos sólo se agrava su divorcio. Ciertamente no esperamos reconciliarlos con nuestras propias fuerzas. No. Haría falta para esta regeneración un poder más que humano, divino en verdad. Pero por eso mismo esperamos esa revolución, y nos colocamos con nuestra frugalidad y nuestras largas caminatas por el desierto en la disposición más conveniente, según creemos, para comprenderla, acogerla y hacerla nuestra, ya acontezca mañana o dentro de veinte siglos”.
Fragmento de “Melchor, Gaspar y Baltasar”
Traducción: Antonio Pavón Leal
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Hermosas palabras, gracias por compartir 🙂
Un saludo!!
Me alegro de que te haya gustado este sugerente texto de Michel Tournier. Saludos cordiales.
Michel Tournier was — for ME — one of the greatest writer ever!
LG from Lu
For me Michel Tournier is also a great writer, of whom I have read quite a few books. The last one was «Gaspard, Melchior & Balthazar». A discovery of fineness and literary sensibility.
Have a nice week.
PS: https://finbarsgift.wordpress.com/2014/02/24/lieblingsbucher/
Has manejado en esta entrada el tema esencial de la vida humana. Todos, pero todos, somos nómadas y el proceso es complicado de asumir. En sí no tenemos nada, no nos pertenece nada ni nadie, y todo nuestro trayecto es un continuo dejar atrás. Esta desnudez material y espiritual es tan difícil de aceptar, porque en occidente (por lo menos) hemos estado sumergidos en una cultura contraria a esto (aferrarse, poseer, estabilidad, rutina, apego, etc., etc.)
El hermoso fragmento de Tournier que tan bien has traducido (pues aunque desconozco el original, tu versión fluye, se transmite el mensaje y se siente en español) es una lección arropada de manera elegante y bella con palabras puntuales.
Por supuesto que se agradece mucho el que nos lo hayas compartido.
Abrazobeso fraterno, cariñoso y admirativo, maagister et frater meus.
Corrijo errata:
«…magister…»
Y por supuesto que provocas el que busque uno los textos de Tournier.
Ni siquiera me había percatado de la errata.
En cuanto a esta novela en particular, «Melchor, Gaspar y Baltasar», que yo sepa, al menos aquí en España, está agotada.
Es tal vez el libro que más me ha gustado de Tournier, a quien he leído bastante. Incluso una de sus novelas la utilicé como lectura obligatoria en mis cursos, concretamente «Vendredi ou les Limbes du Pacifique», que es una recreación del mito de Robinson Crusoe.
Debo buscar su obra, pues hasta tu post me era un autor desconocido. Y no cabe duda que su escritura habrá de llenarme el espíritu.
La novela que usabas en tus cursos debe ser muy interesante. A ver qué encuentro, en su momento, de Tournier.
Todos estamos de paso. Esa es una verdad incontestable. Ahora bien, las actitudes que adoptamos durante el camino son variadas.
La que aquí presenta el autor francés se basa en la frugalidad y la escasez de ataduras, que son, por mi parte no lo dudo, las condiciones de la libertad y de la apertura.
Esos nómadas de una isla del Índico, si no recuerdo mal, llevan una vida que debe ser dura, pero que la mirada del Michel Tournier idealiza. No por ello deja de ser un referente.
Gracias por apreciar mi traducción, pues, como especialista que eres, sabes que no es una tarea fácil. Un abrazo.
En efecto, Antonio, eso es la la libertad. Y, sin duda, Tournier supo condensar la esencia de la vida de esos nómadas para extrapolarla a la existencia humana. El fragmento que nos compartes es claro y muy bello.
Tu traduccción es impecable, porque además no te atreverías a compartirnos algo que no hayas revisado y corregido todo lo necesario. Es tu pudor de escritor jamás satisfecho.
Abrazobeso cariñoso y fraternal, mon cher Antonio.
Una gran filosofía de vida que deberíamos adoptar.
Si fuésemos más frugales y más desapegados, seguramente nos iría mejor. Saludos cordiales.