Y todo para qué
me pregunto y miro
a través de la ventana
los campos lejanos
el azul infinito
una libertad imposible
más allá de las copas de esos árboles
que cabecean al unísono
una paz que se aleja
sin atender a ruegos
Entonces sobreviene
ese golpe capaz de desnucarte
ese pájaro de alas cenizosas
ese iceberg a la deriva
en el océano del tiempo
esa amenaza atenazante
ese pico infernal
ese ángel geométrico y frío
ese emisario de la nada
la pavorosa nada
en cuyo honor se apagan
los colores del mundo
Y todo para qué
me pregunto y miro
un punto distante
tal vez inexistente
Y pienso
esta larga agonía
que sellará la muerte
este largo penar
para acabar pudriéndose
Y yo aquí
mirando a través de la ventana
contemplando aleros desagües y veletas
soñando con árboles que mecen sus copas
observando mis manos a la par que mi boca
se me llena de hiel
Ese vómito amargo
me coloca en el acto
donde me corresponde
gracias a esa lanzada
en mi costado izquierdo
reconozco quién soy
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El bosque silencioso 
Precioso, me gustó muchissimo, gracias
Me alegro de que te haya gustado este poema sobre la condición humana. Saludos cordiales.
J’ai souvent ressenti ceci. Mais le coeur continue de battre, on continue de vivre. Et d’être.
C’est un très beau poème.
Merci pour ton appréciation du poème.
C’est dur de ressentir cela, de regarder face à face l’absurde, le néant, la névrose. D’ailleurs on est contraint de côtoyer ses intrus. Qu’est-ce qui nous sauve ? Qu’est-ce qui nous permet de recouvrer la confiance pour continuer à vivre ? Il y a les autres et de nombreux médicaments et thérapies bien sûr, mais moi j’ai aussi le sens de la transcendance. On pourrait parler longuement là-dessus, mais après avoir lu et relu le Phédon, et même avant, je partage la douce espérance socratique qui me fait croire et attendre qu’il n’y a pas de fin mais de suite. Je fais ce pari en fou joueur qui défie sa chance et son destin apparent parce que « c’est un risque qui vaut la peine d’être couru » (dans la version espagnole parce que « el riesgo es hermoso »). Cela, au moins, et sottement, si tu veux, réchauffe intérieurement. Amicalement.
Ton point de vue est intéressant. Moi j’ai l’impression que tout est transitoire et temporaire : thérapies et médicaments en tout cas ont une fin ( et tant mieux)
Je vais devoir relire Platon 🙂
Muy hermoso y sentido. Saludos.
Este poema no es un mero ejercicio estilístico sino una creación literaria, y en ese sentido sujeta a una exigencia expresiva, que refleja experiencias vividas. Me complace que te haya parecido hermoso. Saludos cordiales.
Hermoso es algo más que «bonito, rítmico o poético…», es intenso, tienes razón.
¿Y todo para qué? Para que pudieras expresar con este tu estilo tan fino y contundente, toda la fuerza volcánica que gritan estos versos. Poemísimo, Antonio querido. Abrazo enorme y gracias por regalarnos esta lírica.
Soy yo quien te está muy agradecido por contarte entre mis amigos. Este poema se sitúa en la misma línea existencialista, sin concesiones, volcánico, como tú lo calificas, que el publicado la semana pasada. Es una variación, un paso más o una profundización en el tema del ser humano enfrentado a su fragilidad y expuesto a los embates de la angustia. Esa «lanzada en el costado izquierdo» la recibe todo el que aterriza en esta existencia. Aparte de una referencia religiosa, es la confirmación de nuestra humanidad. La cuestión es si debemos permanecer en esa desolación o si, una vez inmersos en ella, debemos hacer algo para trascender (que es un verbo que utilizo a menudo porque no se me ocurre otro) esa situación y dar una respuesta creadora e integradora. Es iluso querer excluir el sufrimiento. Pero se le puede asumir a nivel social, estético, espiritual y tejer con él una obra de la que puedan beneficiarse otros, contribuyendo de esta forma a la mejora y al embellecimiento del mundo. Un gran abrazo.
Entre tus poemas y las reflexiones que compartes en torno a ellos, se hace una gran luz, mi querido Antonio. No puedes expresar mejor los conceptos. Te mando un enorme abrazo, amigo.
Para poder soñar con los árboles, sus colores. Porque si los sueñas, los has visto, los ves en ese instante. Qué más se puede pedir. 🙂
Con eso es suficiente. Contemplar el mundo manifiesto es un privilegio que compensa de inconvenientes, desengaños y sinsabores. Me basta dar un paseo por el campo y disfrutar de los colores de la naturaleza para reconciliarme con muchas cosas, por no decir con todas. Es como sumergirme en la Creación y reconocer que, en definitiva, todo está ramatadamente bien 🙂
Sí 🙂 Bonitas palabras para irme a dormir amigo!
Tan sincero y Tan HERMOSO ( el poema). ¿ Soy yo quién soy…?, sí al final del camino…sí.
¿ Y todo para qué?, gran pregunta existencialista…para dar Belleza, Antonio, para armonizar el alma, es lo que tú haces…
¿ Y todo para qué?, para hacer menos infeliz esta Vida compensando la balanza de la mejor manera que podamos, aunque sea tan solo un pequeño grano de arena, no es mucho pero es algo, peor es no aportar nada.
Dar pinceladas de tonos dulces, en otras ocasiones el colorido será más oscuro no hay que rechazarlos tampoco porque ellos deben estar presentes en nuestras vidas para nuestra positiva evolución como personas. A veces el manto de la tristeza pesa mucho, pero lo tejieron para que no olvidemos todo lo necesario para el mejor vivir en otras ocasiones.
¿ Qué es la vida?, el fado, diría yo.
Este es un poema existencialista. Tu interpretación o tu respuesta a la pregunta que lo inaugura, y a cualquier crisis vital, es consoladora. Es también por la que siempre he optado: la belleza como puerta a la trascendencia o, según tus palabras, como vía armonizadora.
Esta composición es mi grano de arena a la construcción de ese país bienaventurado.
En el poema predominan tonos sombríos pero verdaderos, no productos de una pose literaria o filosófica.
Este poema no es un fado, pero la vida sí tiene mucho de esa melancolía que rezuma la canción de Dulce Pontes, de ese fatalismo que es la marca de los que han sufrido y, aun asumiendo su dolor, encarándolo valientemente, saben que ese es su lote.
¡Ay, madre qué mundo más peligroso y apasionante el de las palabras, nos hacen volar sin darnos cuenta!, ellas ( las palabras) nos vencen y nos conocen mejor que nosotros mismos, a veces me pregunto ¿ y qué he dicho?, ni tan siquiera lo sé.
Si nos dejamos guiar por ellas, las palabras nos descubrirán nuevas perspectivas, mundos insospechados, parcelas desconocidas de nuestro ser. Nosotros no somos sus amos sino sus servidores.
¿ Y Todo para qué?, para engrandecer al Mundo con besos regalados, para construir puentes entre lo onírico y la pequeña posibilidad de realidad, para que no se queden con lo que no les pertenece y seguir soñando realidades.
¿ Y Todo para qué?, pues para eso mismo, para el Todo…que no es poco.
Otra respuesta a la pregunta. Y otra bonita canción cuyo título puede ser la razón de la vida.
Lo pequeño es el Todo, diminuto pero es el TODO, es lo extraordinariamente normal y sentido.